Retinopatía diabética
Enfermedades de la retina y vítreo
Es una complicación ocular de la diabetes, causada por el deterioro que provoca el exceso de glucosa sobre los vasos sanguíneos. Estas lesiones vasculares pueden provocar la aparición de edema, hemorragias y la formación de neovasos y membranas que pueden traccionar y desprender la retina causando una grave pérdida visual.
Con frecuencia, es el oftalmólogo el que detecta la retinopatía diabética antes de que el paciente manifieste problemas visuales.
El diagnóstico correcto de las lesiones en la retinopatía diabética se realiza mediante la exploración oftalmológica con examen del fondo de ojo y la realización de una prueba denominada angiografía fluoresceínica en la que se pueden valorar lesiones no apreciables con otros métodos. En esta prueba se inyecta un colorante biológico en el brazo y se realizan fotos secuenciales en el fondo de ojo mediante una cámara fotográfica apropiada. Todos los pacientes diabéticos deben ser examinados por un oftalmólogo al menos una vez al año.
Visión con retinopatía diabética
El tratamiento de la retinopatía diabética debe comenzar por un buen control metabólico de estos pacientes. Un control estricto de los niveles de azúcar en sangre puede reducir de forma importante el riesgo de perder visión por la evolución de la retinopatía diabética.
También deben controlarse y tratarse otros problemas asociados que aceleran la evolución como la hipertensión arterial o enfermedades del riñón. En los casos en los que las lesiones producidas en la retina por el exceso de glucosa, la fotocoagulación de las zonas lesionadas con rayos láser es un tratamiento efectivo ambulatorio y no invasivo que en un alto porcentaje de casos puede detener el daño y que con frecuencia debe ser aplicado más de una vez.
Existen pacientes en los que no se puede usar el láser como cuando el humor vítreo está lleno de sangre de forma prolongada, o casos en los que existen membranas fibrosas en la retina. En estos pacientes la vitrectomía puede sustituir el vítreo hemático por una solución artificial y restaurar la transparencia. También puede eliminar las membranas que traccionan y desprenden la retina. En los casos avanzados de edema macular puede ser efectivo la inyección dentro del vítreo de diferentes fármacos para controlar las complicaciones avanzadas de la diabetes que amenazan o reducen la visión.